Inicio
Experiencias

Sublim Eiffel: un haz eléctrico en la Ciudad Luz

Distinguida por una estética atractiva y luminosa, la propiedad se erige como una propuesta original en la capital francesa. Además cuenta con una gran ventaja: se encuentra a mano de la Torre Eiffel y de muchos otros atractivos locales como el Museo Rodin, la sede de la Unesco, la estación Montparnasse y, a su lado, una de las galerías Lafayette.

La capital francesa ha sabido ganarse varios nombres a lo largo de su historia y ninguno tan conocido como el de Ciudad Luz. En este sentido, el particular estilo del Hotel Sublim Eiffel aporta un vibrante haz de neón a toda la luminosidad de una París siempre resplandeciente.

Ubicado en una zona fronteriza entre los distritos séptimo y decimoquinto, sobre el bulevar Garibaldi, el hotel cuenta con una fachada con doble identidad: durante el día puede pasar inadvertida, a tono con el sobrio estilo del barrio, pero a la noche su carácter es efusivo, cuando sus aberturas se iluminan de todos los colores.

La recepción es simplemente funcional, derivando necesariamente a un ascensor cuya cabina emana un intenso fulgor rojo mientras traslada a los huéspedes hacia sus habitaciones. Abrimos la puerta del cuarto y el primer paso cae sobre la Torre Eiffel del alfombrado: todo el suelo está cubierto por el trazado de calles y la localización de los monumentos parisinos. Pero como sabemos que el territorio es más interesante que el mapa, los siguientes pasos se dirigirán a los balcones. Un giro de picaporte ayudado por un golpe de viento abre las hojas de par en par y revelan la postal de una magnífica Torre Eiffel asomada en su rol de centinela urbano. La vista, que se completa con la estación del métro en primer plano, es especialmente cautivante de noche, cuando el ícono centellea infatigablemente.

En las habitaciones se nota el perfil del hotel orientado a las parejas (si son románticas tanto mejor), con una gran cama que despide una cabecera metálica curvada hasta el techo y una iluminación basada en fibra óptica con predominancia de tonos azules. Esta impronta, algo eléctrica y bien definida, puede resultar algo chocante en principio, pero no tardaremos mucho en sentirnos cómodos.

El espacio se completa con una mesita, frigobar y los espacios de baño: una ducha vidriada con hidrojets, un tocador y un toilette separado. En el caso de la suite Balnéo, habrá que adicionar más metros cuadrados y un hidromasaje. Actualmente, bajo el título “Romance à Paris”, el Hotel Sublim propone estadías para enamorados que incluyen botella de champán y un corazón hecho con pétalos de rosa.

El desayuno merece un párrafo aparte, en primer lugar porque el área consagrada a la primera comida del día –ineludible para enfrentar los paseos y actividades– hace gala de un estilo retro en base a lámparas decoradas con plásticos multicolores, mesas cromadas, butacas de pana roja y música suave. Luego hay que destacar los ingredientes, típicos de la tradición francesa, con una muy buena variedad de patisserie, mermeladas, fiambres y, sobre todo, quesos.

Finalmente, vale mencionar otras facilidades adicionales, como un área de spa con hammam y la posibilidad de tomar masajes. Asimismo, todas las áreas comunes y habitaciones cuentan con conexión gratuita a Internet wi-fi.

UBICACION IMPECABLE.

La posibilidad de dar un paseo por la Torre Eiffel, tanto de día como de noche, con la certeza de que nuestro hotel está a tan sólo unas cuadras representa una ventaja difícil de rebatir. Ésta es apenas una de las bondades de la ubicación del Hotel Sublim, en una quíntuple encrucijada de calles que disparan hacia todos los puntos cardinales parisinos.

Si hablamos de atractivos cercanos, a no más de cinco cuadras, podemos enumerar el Hotel des Invalides, el Museo Rodin, la sede de la Unesco, la estación Montparnasse y, a su lado, una de las galerías Lafayette. Del mismo modo, a poca distancia uno se puede internar en Saint-Germain-des-Prés, los jardines de Luxemburgo y el Barrio Latino.

En este mismo sentido, otra indiscutible virtud es que la propiedad se sitúa justo enfrente de la estación del métro Sèvres Lecourbes, que forma parte de la extensa red de transporte subterráneo de París. De esta manera, en un santiamén los huéspedes se pueden trasladar del Hotel Sublim a cualquier punto de la metrópoli, prácticamente como si viajaran a la velocidad de la luz.

TIPS PARA EL VIAJERO

Ubicación: 94, boulevard Garibaldi.

Cómo llegar: desde el aeropuerto Roissy Charles de Gaulle (distante unos 29 km.) hay que tomar el tren regional RER B en dirección a Robinson-St Rémy-lès-Chevreuse y bajar en Denfert Rochereau. Tomar después la línea 6 del metro en dirección a Charles de Gaulle Étoile y bajar en Sèvres Lecourbe, parada que está frente al hotel.

Informes: +33 1 40 65 95 95/[email protected]/www.sublimeiffel.com.

Deja tu comentario