Volví al Iberostar Grand Paraíso con temor, pensando de que al que considero como uno los mejores all inclusive del mundo podría no estar a la altura de visitas anteriores. Quienes amamos viajar repitiendo destinos y hoteles sabemos que la pandemia puede haber modificado algunas realidades, ya sea por cuestiones económicas o simplemente por adaptarse a nuevos protocolos.
Iberostar Grand Paraíso, lujo y calidad en Riviera Maya
Pero grande fue mi sorpresa, sin embargo, al comprobar que en este verdadero edén caribeño todo sigue siendo maravilloso. Es más: hay detalles que se han mejorado, como la reciente apertura de un salón para degustaciones de vinos guiadas por un experto sommelier, propuesta que por un pequeño costo adicional introduce a los huéspedes en el fascinante mundo de la enología.
También fue muy grato constatar el compromiso que la cadena Iberostar mantiene con la sostenibilidad a través del programa Wave of Change de protección de los océanos. Durante mi estadía, por ejemplo, era la época de veda en la pesca de langosta, por lo cual dicho crustáceo se encontraba fuera de las cartas de los restaurantes, aunque dignamente reemplazado por langostinos, ostras, pulpo español, salmón rosado y atún rojo para adherir al proyecto de promover el consumo responsable de pescados y mariscos. Otros puntos donde se observa la postura de la cadena hotelera a favor de la ecología está los productos de higiene personal, todos orgánicos, y en las botellas de agua recargables y libres de BPA.
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Arribando al Paraíso mexicano
Al llegar al hotel, tras una cálida recepción y un check-in expeditivo y simple, fui trasladado en carrito de golf a un hermoso y enorme cuarto con detalles de gran categoría. En Iberostar Grand Paraíso todas las habitaciones son suites y cada una tiene sus ventajas y fanáticos.
En mi caso, me alojé en uno de los dos edificios frente al mar, donde además de la vista al océano disfruté de un gran balcón con hamaca que invitaba al relax mientras se escuchaba el sonido de las olas.
Estas habitaciones tienen cercanía a la playa y a la piscina central, lo que las vuelve muy cómodas. Por otro lado, los cuartos ubicados en el edificio principal gozan de una mayor proximidad a los bares y restaurantes, lo cual los vuelve ideales para adultos mayores que tras un intenso día de sol no desean caminar tanto.
Finalmente, las villas se encuentran algo más apartadas y sin vistas al mar, pero son más amplias y privadas, siendo una excelente opción para quienes prefieren intimidad y silencio.
Un valor agregado es la presencia del mayordomo, que se interioriza rápidamente de las preferencias del huésped ocupándose de reservar los restaurantes, acercar las botellas de licores elegidas para degustar en la habitación e, incluso, en noches de celebraciones, tener la gentileza de decorar románticamente la cama y el jacuzzi con pétalos de rosas.
Viviendo en el Paraíso
Con el sol como protagonista de cada día, es momento de disfrutarlo y nada mejor que las piscinas para refrescarse. El resort posee tres, destacándose la principal por su gran extensión y la particularidad de ser de agua salada. Allí se desarrollan entretenidos juegos durante la mañana y la tarde. Cuenta además con un “aqua-bar” con bebidas de alta gama, incluyendo Remy Martin VSOP, Chivas Regal, Johnnie Walker Black Label, Grey Goose, Don Julio Reposado, Tanqueray y Grand Marnier, entre otras prestigiosas marcas.
Quienes prefieran un ambiente más calmo, pueden visitar la piscina tranquila, dotada de dos jacuzzis y una longitud perfecta para nadar. Por último, en el spa hay una piscina climatizada y lúdica con distintas opciones de jets de agua a presión.
Alrededor de todas ellas, así como en la playa, hay gran disponibilidad de reposeras y camastros, cantidad que evita madrugar en exceso para reservarlos. En todos los casos se dispone de toallas de delicado algodón, ilimitadas.
Si el clima no acompaña es recomendable visitar el centro comercial del complejo. Tiendas de ropa, joyerías y artesanías son algunas opciones para llevarse un bonito recuerdo a sus hogares. Además, una taquería, una heladería y una cafetería forman parte del régimen all inclusive por si se desea matizar las compras con algún bocadillo.
Pero lo más interesante del shopping es el spa, con libre acceso para los huéspedes alojados en el Iberostar Grand Paraíso. Es sólo para adultos, lo cual garantiza una tranquilidad absoluta. Cuenta con una amplia piscina con estaciones de relajación, pequeñas albercas a distintas temperaturas, duchas especiales y diferentes saunas. Con costo adicional se puede reservar algún tratamiento corporal, destacándose el masaje de piedras calientes.
Degustando el Paraíso
Tal vez el punto icónico del Grand Paraíso sea su sofisticada gastronomía. Los productos premium dicen presente en cada momento del día, tanto en el buffet diario como en los cinco restaurantes a la carta. Cada uno presenta un inolvidable menú.
Haiku, de cocina japonesa, ofrece sushi de primer nivel con rolls clásicos e innovadores (recomiendo el de carne waygu) y un show de teppanyaki en cómodas islas con un hábil y simpático chef al mando. Resulta muy romántico ir a cenar a Venecia, con decoraciones romanas y platillos italianos como carpaccio de lomo y risotto de camarones. Es imperdible probar Toni´s Surf & Turf donde están a la vista cortes de res como el ojo de bife o el New York steak, y pescados como filete de salmón o de atún rojo.
Para degustar sabores franceses y delicados, recomiendo el restaurante L´Atelier donde probé la tradicional sopa de cebolla y un exquisito cordero al horno. Al margen de estas cuatro alternativas se puede escoger el descontracturado La Brisa. Es de gastronomía mexicana, y además de encontrarse frente al mar, se acepta vestimenta más informal. Por último, el buffet Bella Vista ofrece desayunos, almuerzos y cenas con estaciones de comidas para todos los gustos. En lo personal, sugiero comenzar con la selección de quesos y jamón ibérico, continuar con pulpo español y finalizar con algún postre característico de aquellas latitudes como el pastel tres leches. Pero es solo una recomendación ya que las opciones son interminables y de tan alta calidad que una semana no alcanza para probarlas a todas.
Al finalizar la jornada los sorprenderán algunos shows en el área de piscina o en el patio del lobby, que varían desde danzas típicas mexicanas hasta muestras circenses con antorchas de fuego o aqua-dance, entre otros. Una alternativa adicional es deleitarse con pianistas y músicos en vivo que crean un ambiente muy ameno en el lobby bar. Y para mayor diversión, no dejen de concurrir algunas noches al bar de mixología, Rhapsody donde experimentados bartenders combinan técnicas y bebidas para obtener texturas, aromas y presentaciones que transforman cada trago en una verdadera obra de arte. Este bar amerita probar las reversiones de clásicos de la coctelería internacional. El smoked negroni, ahumado delante del huésped, es un imperdible, así como el martini mediterráneo o el mezcalita que rescata lo mejor de las tradiciones mexicanas. Y entre brindis y brindis podrán participar de un divertido karaoke o bailar con la selección de canciones de un Dj en vivo.
Evaluando el Paraíso
El Iberostar Grand Paraíso es la elección ideal para parejas. Lujo y servicio de excelencia son los cimientos para una combinación inmejorable de relax y diversión. El placer de saber que todo funciona perfectamente y que cada momento del día será maravilloso es sólo el punto de partida para para empezar a soñar con visitarlo una y otra vez. No importa cuántas noches decidan hospedarse, las vacaciones perfectas existen y están garantizadas en este increíble resort.
Ficha técnica: Iberostar Grand Paraíso
- Dirección: carretera Chetumal, Puerto Juárez, Playa Paraíso (Quintana Roo).
- Teléfono: 52 984 877 28 00.
- Apertura: marzo 2007.
- Régimen: all Inclusive - sólo para adultos.
- Piscinas: tres (con bar, de relax, y climatizada en el spa).
- Habitaciones: 310 suites (120 frente al mar) y 10 villas para luna de miel
- Restaurantes: Bella Vista (buffet), La Brisa (caribeño), Haiku (japonés), Toni´s (pescados y mariscos) y Venecia (italiano).
- Servicios adicionales: spa, campo de golf de 18 hoyos, escuela de buceo, clases de navegación, cocina y baile.
- Información adicional: Iberostar Grand Paraíso
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