Dubái, en sus tan sólo 35 km² atesora varios récords mundiales. Ostenta, por caso, el edificio más alto, la torre Burj Khalifa, de 830 m.; el mayor centro comercial, el Dubai Mall, de 836 mil m² y con más de 1.200 tiendas; y –entre otros logros– el hotel más singular, el lujoso Burj Al Arab, erigido sobre el golfo Pérsico, a 270 m. de la costa. Y este emirato, uno de los siete que integran los Emiratos Árabes Unidos, va por más con la organización de la Expo 2020.
Dubái: ventana a un mundo nuevo
“Pero el 2020 ya pasó”, podrán preguntarse muchos. Es que la pandemia obligó a postergar su realización y sus responsables prefirieron mantener esa denominación para la primera vez en que la Exposición Universal aterrice en el mundo árabe. Será del 1° de octubre de 2021 al 31 de marzo de 2022, seis meses en los que, con sobrado optimismo, se apunta a recibir a 25 millones de visitantes, la misma cantidad que los previstos antes de la emergencia sanitaria global.
Bajo el lema “Conectar mentes, construir el futuro”, la Expo 2020 reunirá innovaciones en arquitectura, medio ambiente y tecnología de unas 190 naciones en el flamante centro de eventos Dubai Trade Center, de 400 ha., erigido al sudoeste del centro urbano, lugar donde hasta no hace mucho sólo había dunas desérticas.
Semanas atrás, Swatch, sponsor oficial del encuentro, puso en marcha un enorme reloj digital que marca la cuenta regresiva hasta el momento de la inauguración después que, de manera virtual, el skater profesional dubaití Karim Nassar invitara a la audiencia a un vertiginoso recorrido por los principales puntos de interés de la urbe hasta llegar el Dubai Frame, el marco fotográfico (para no ser menos) más grande del mundo.
“Cuando nos une, la humanidad no tiene límites. Y nuestra promesa sigue en pie: conectar mentes y crear el futuro”, dijo Reem Al Hashimy, ministra de Estado para la Cooperación Internacional de los Emiratos Árabes Unidos y directora general de Expo 2020 Dubai.
Terra, todo un adelanto
Recientemente, entre el 22 de enero y el 10 de abril, se pudo visitar Terra, el Pabellón de la Sostenibilidad en formato “Pavillions Premiere”, a fin de brindar al público en general una aproximación a lo que será la Expo 2020 Dubai. Luego se hará lo propio con el Alif, el Pabellón de la Movilidad; y Mission Possible, el Pabellón de la Oportunidad.
Con grandes estructuras de metal que se asemejan a árboles giratorios que proporcionan energía solar y que condensan agua, como un bosque artificial, Terra recibió a los visitantes. A fin de administrar su capacidad del predio en tiempos de pandemia, se requirió una reserva previa online y estuvo abierto en horarios vespertinos acotados, de martes a sábados.
Terra contó con conciertos musicales en vivo, actividades para niños, Food Trucks, el Terra Café y la venta de artículos exclusivos.
Mientras las campañas de promoción de la Expo ya están instaladas alrededor del mundo, vale recalcar que Dubai avanza con la vacunación contra el Covid-19: ya logró inmunizar a más del 35% de su población. Y abrió sus fronteras al turismo, requiriendo a los viajeros procedentes de cualquier origen una prueba PCR con resultado negativo realizada no más de 72 horas antes de la salida.
Mirando al futuro
El foco en la sostenibilidad no es casual ni una moda en Dubái. Durante los tórridos meses de verano el consumo de aire acondicionado representa el 60% de la demanda máxima de electricidad del emirato. Uno de los niveles más elevados del mundo.
Por tal motivo, las fechas elegidas para la realización de la Expo coinciden con los momentos en que el termómetro da algo de tregua. La misma razón que llevó al vecino Qatar a trasladar la Copa Mundial de Fútbol para fines de noviembre.
En esta apuesta en pro del medio ambiente, el pabellón austríaco -por citar un ejemplo- ostentará un sistema de ventilación pasivo y natural, inspirado en un “baryil”, una torre de viento que data de hace 5.000 años. Su intrincado sistema de construcción, con muros hechos de arcilla compactada y domos cónicos de ventilación, podrían reducir el consumo de energía en un 72%, dicen los arquitectos responsables del diseño.
Otros pabellones, algunos ya construidos y otros en obra, mostrarán lo que vendrá: vehículos del futuro, exploración espacial e infinidad de iniciativas que apuntan a vivir en un planeta mejor.
El pabellón del emirato anfitrión, creado por el célebre arquitecto español Santiago de Calatrava, sorprenderá por su diseño futurista, representado por un halcón en vuelo, símbolo de la cetrería, actividad con profundas raíces en la cultura emiratí.
El mundo en un solo lugar
Por primera vez en la historia de la Exposición Universal, cada país participante tendrá su propio pabellón, desplegando experiencias culturales, avances tecnológicos y descubrimientos de todo tipo. Además, los dos patrocinadores más importantes, Emirates Airline y DP World, dispondrán de pabellones específicos.
Con toda la lógica, la realidad del Covid-19 dará su presente en Dubái. De hecho, el comité organizador está trabajando en decenas de proyectos vinculados con aportar soluciones a la pandemia, como un dispositivo que controla el distanciamiento social.
Primero, la economía de Dubái estuvo motorizada por el negocio de perlas; y después por el petróleo, un activo que enriqueció a toda esta franja del golfo Pérsico. Ahora, a caballo del turismo, la gran apuesta es una Expo que espera generar más de € 200 mil millones en inversiones.