Al sur del mar Caribe, la isla de Curazao despliega características que la transforman en un enclave totalmente diferente de cualquier otra isla de este paradisíaco lugar. Es que la influencia cultural holandesa, caribeña, africana y latina se hace presente en cada rincón del destino con su arquitectura y sus costumbres.
Curazao: ¿Por qué visitarla al menos una vez en la vida?
Curazao es una parada obligatoria si decidimos recorrer las islas paradisíacas del Caribe. Dicen que cuando uno conoce el mar de este lugar, siempre va a querer volver a visitarlo.
Visitar Curazao no es sólo ir a la playa. También es recorrer su ciudad. La preciosa arquitectura colonial neerlandesa; las impresionantes formaciones geográficas; la insuperable fauna marina; la exquisita gastronomía y la punzante alegría de sus habitantes son algunos de los atributos más importantes de este destino. Todo esto sin olvidar sus aguas cristalinas y un clima privilegiado a lo largo de todo el año.
Pero veamos en detalle por qué hay que visitar Curazao..
Willemstad, la preciosa capital de Curazao
Un recorrido por Curazao debe comenzar obligadamente por su capital, Willemstad. Lo primero que un turista ve cuando arriba a ella es una característica que la hace única: su arquitectura. El centro de la ciudad fue declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco en 1997, y consta de dos distritos principales: Punda, que es la sección más antigua de la ciudad y conocida como su centro cultural; y Otrabanda, considerado el mejor sector para salir de compras.
La zona histórica es un ejemplo de asentamiento comercial colonial en el Caribe. Fue establecido por los holandeses a partir de la construcción de Fort Amsterdam (1634) al este de la bahía de Santa Ana, y siguió desarrollándose de manera continua en los siguientes años.
Considerada la capital comercial del sur del Caribe, Willemstad atrae además a compradores del mundo entero. Sucede que, cada día, una gran multitud de vendedores y mercados exhiben sus productos frescos, carnes, frutas exóticas y mucho más, como lo hace el pintoresco y colorido mercado flotante de Punda en Sha Caprileskade, justo a la vuelta de Handelskade, donde es posible pasear por el muelle y la bahía de Santa Ana.
La ciudad de los puentes
Otro de los grandes atractivos de Willemstad son sus puentes, que atraviesan las vías fluviales de la ciudad, y que fueron bautizados en honor a algunas de las reinas holandesas más recordadas. Entre ellos se destacan:
- Puente Reina Emma.
- Puente Reina Juliana.
- Puente Reina Wilhelmina.
Playas para todos los gustos
La isla de Curazao está conformada por más de 38 paradisíacas playas de todos los tamaños y estilos, y también para todos los gustos.
Y lo mejor de las playas de Curazao es que ostentan un ambiente cálido, cómodo y agradable. Durante el día los turistas pueden gozar del sol, el mar y su gente; mientras que por las noches muchas de ellas se erigen como escenarios de fiestas únicas. Entre ellas, se destacan:
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Playa Kalki
Se trata de una pequeña cala óptima para practicar esnórquel y buceo, que presenta además un área protegida con una plataforma flotante. Para acceder a ella es necesario bajar por un empinado camino de piedras desde la zona de estacionamiento. A mitad de camino entre esta área y la playa hay una terraza sombreada con un bar y una hermosa tienda de artículos para buceo.
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Playa Piskado
Popular para realizar esnórquel y buceo, esta pequeña playa de pescadores es perfecta para quienes desean compartir la tarea diaria de los locales y tomar pintorescas fotos. La entrada al agua es un tanto pedregosa.
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Kenepa
Es una de las más buscadas del destino. Una playa que definitivamente vale la pena visitar, a partir de sus hermosas vistas, cálidas brisas y tranquilas aguas azules, que la convierten en un lugar perfecto para relajarse. Se trata en realidad de dos playas: Kenepa Grandi (la más grande) y Kenepa Chiki (la más pequeña e íntima), también conocidas como Grote Knip y Klein Knip. Hay zonas de esnórquel y grandes extensiones de arena blanca con hermosas aguas cristalinas. Entre ambas playas hay un mirador de acantilado ideal para tomar fotos.
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Cas Abao
Arenas blancas, aguas cristalinas, altas palmeras y mucha sombra. La playa combina un escenario agreste con todas las comodidades y servicios completos. Cas Abao es ideal para los nadadores de todas las edades, y sus arrecifes constituyen un paraíso para el esnórquel y el buceo. Hay una balsa para tomar sol atada a la playa, además de bar, restaurante, duchas, baños y espacio para masajes.
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